
El Proyector Mental en Diseño Humano es un tipo de Proyector excepcional, tanto por sus características como por su presencia minoritaria en el mundo: apenas el 2% de la población son Proyectores Mentales.
Los Proyectores pertenecen a un tipo No Energético, es decir que no están orientados a la acción. Su verdadera fortaleza radica en su inteligencia y su capacidad para observar y percibir patrones y detalles que a menudo pasan desapercibidos para otros.
En Diseño Humano siempre hablamos de que la Autoridad Interna a la hora de decidir nunca es la mente. Todo aquello que está coloreado en nuestro Diseño nos define y es allí donde debemos anclarnos para conectar con nuestra esencia y nuestra Autoridad Interna.
Lo curioso en el caso del Proyector Mental es que lo único que tiene definido en su Diseño es la mente, es decir que, lo único consistente y fiable en su Diseño es de lo único que no se puede fiar a la hora de decidir; y esto es todo un reto.
El Proyector Mental está diseñado mecánicamente para ser una Autoridad Externa para las personas que reconocen su inteligencia, a las que tiene el potencial de ofrecer una guía eficiente a través de preguntas simples que abren nuevas posibilidades que quizá la otra persona no había contemplado.
La estrategia orgánica o el movimiento natural del Proyector Mental es Esperar por una Invitación Formal antes de embarcarse en nuevos proyectos o relaciones. Esta espera permite asegurar que sus dones sean reconocidos y valorados por aquellos que los invitan.
El gran reto para el Proyector Mental es que cuando llega una invitación formal no tiene una Autoridad Interna a la que anclarse que le indique si esa invitación es correcta o no. Esta condición le obliga a ser muy paciente antes de tomar cualquier decisión en su vida, sobre todo con decisiones importantes como: la pareja, qué estudiar, en qué trabajar, tener hijos, el sitio donde vivir etc. Y también le obliga a ser muy paciente con su propia mente, ya que tener la mente como única definición en su Diseño, les hace caer fácilmente en la tentación de decidir en base a los dictados de su mente.
La manera correcta de decidir para un Proyector Mental pasa por compartir su decisión con su entorno cercano. Tener diferentes conversaciones con personas de su confianza acerca de esa decisión, hace que ésta vaya tomando forma. No se trata de pedirles consejo, se trata de escuchar lo que sale por su boca cuando habla con otras personas sobre la decisión, y esto requiere de mucho tiempo y paciencia.
Integrar que la mente nunca es Autoridad Interna es difícil de entender para un Proyector Mental que piensa que las oportunidades se le van a escapar si no actúa en base a lo que le indica su mente.
El Proyector Mental es como un faro que se puede ver desde varios kilómetros. Es imposible no verlos. Si a esto añadimos su capacidad única para prestar atención (nadie te va a prestar atención de la manera en la que lo hace un Proyector Mental) y lo raro que es encontrarte con ellos (dado el poco porcentaje de población de este tipo), esto les hace ser personas muy atractivas y exóticas para los demás, es decir, que siempre van a tener mucho público llamando a su puerta. Por eso, es muy importante que sepan ver si esas personas les están reconociendo por sus dones o simplemente están acudiendo a ellos como las polillas atraídas por la luz.
No tener definición en su Diseño de garganta para abajo les hace ser personas que se enganchan fácilmente a cualquier condicionamiento externo, pudiendo amplificar formas de vivir muy alejadas a su naturaleza. Es muy común ver a Proyectores Mentales trabajando más que nadie, intentando llegar a todo, con la lengua fuera y diciendo: -no os preocupéis, estoy bien, yo puedo con todo- aunque estén realmente exhaustos.
Tener esta apertura en sus Diseños de garganta para abajo les hace ser muy vulnerables, pero esta vulnerabilidad puede llegar a ser su gran fortaleza cuando entienden que es primordial en su vida ser extremadamente exquisitos con las personas con las que se relacionan.
Un ejemplo que les pongo siempre a los Proyectores para que entiendan la importancia de las relaciones en su vida, es que vean al otro en términos de comida y se hagan la siguiente pregunta: si esta persona fuera un plato de comida, ¿te la comerías?, porque eso es lo que sucede cada vez que entran en contacto con otra persona, y si la otra persona no es la correcta, van a tener una buena indigestión; una indigestión que se vive en forma de amargura, resentimiento, rechazo, falta de reconocimiento, o de pensar que no se está a la altura...
El Proyector Mental está diseñado mecánicamente para relacionarse en el uno a uno. Cuando aparece un tercero en escena, pierde su capacidad de enfoque y siempre habrá alguien molesto que le reproche el no sentirse atendido, o el sentirse menos atendido que el otro.
El éxito es la firma de cualquier Proyector y tiene poco que ver con la fama, el dinero o el reconocimiento social. El éxito para un Proyector es ser reconocido por el entorno cercano con el que comparte su vida: ser reconocido por lo que es, no por lo que hace.
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